24 diciembre, 2009

Felicitación navideña 2009


Fue mirando una a una las huellas de su pasado, sin olvidar las futuras que eran las que le importaban. Vio en todas ellas una flor y una canción, y así fue emparejando a la de un ciclamen con Hotel California de Eagles, un clavel amarillo con Imagine de John Lennon, una gerbera roja con Love me tender de Elvis Presley y una rosa blanca con Everybody Hurts de R. E. M. Y fue en ese momento cuando decidió felicitar la Navidad a sus amigos haciéndole mención a sus juegos de flores y música y palabras.

03 diciembre, 2009

En la esquina

(Ilustración: Los borrachos/Velázquez)


(Escrito para CanariasAhora Radio y leído en su programa "El correíllo" el día 22 de diciembre de 2009)


Desde las primeras horas de la mañana, como siempre, en la esquina, junto al bar, apoyado sobre el hombro derecho y tambaleándose a menudo, su mirada se desparramaba como haciendo círculos concéntricos, aquí y allá, aunque las más de las veces tras la figura de una mujer, de cualquier mujer, a ver si como por ensalmo podía ser la suya, la que fue y le dio hijos y felicidad y amor a destajo durante años hasta que al alcohol pudo más que él. Sin embargo, nunca la encontraba el hombre, aunque infinidad de veces se confundía, y entonces dejaba traslucir ante la de turno una sonrisa babosa, bobalicona y servil; también, en ocasiones, se acercaba a la mujer que creía la suya, se arrodillaba a duras penas, alzaba los brazos como clamando al cielo y al mismísimo Dios y decía: Perdóname, esposa mía, te juro que ya nunca más volveré a beber; pero luego, cuando la realidad se imponía, se derrumbaba una vez más y caía al suelo derrotado, sin resuello aparente para poderse levantar, casi siempre con los pantalones meados.

02 diciembre, 2009

¡Feliz cumpleaños, hijo!

(Foto autora: Margarita Ramírez)


Querido hijo:

En este día tan especial para ti, cuando cumples 23 años, mamá y papá sólo pueden decirte que constituyes lo más hermoso de nuestras vidas, por eso, brindamos por ti y por nosotros: por ti por tu existencia, por nosotros por tu existencia.
No creemos que hayan padres tan orgullosos de un hijo como nosotros, y no por nada, y no por el simple hecho de ser padres, y no porque hayas alcanzado cotas inimaginables en tu trayectoria académica, sino porque como persona eres insuperable, y no lo decimos sólo nosotros, hijo, sino todos aquellos que han tenido la oportunidad de conocerte: gracias por ser tú, como eres, como has querido ser.
Si es una golosina de Dios ser madre o padre, nosotros, desde que naciste aquella madrugada del 2 de diciembre de 1986, no hemos dejado de tener nuestras bocas dulces.
¡Qué suerte, Dios, ser padres de un hijo como tú!
Qué pases un feliz día, mi amor, y que cumplas muchísimos años llevando siempre por bandera tu excelsa personalidad.
Te queremos,